Para el diseño o la remodelación de un espacio es importante saber elegir bien el color a utilizar. Un buen diseño arquitectónico no está completo sin tomar en cuenta el color y puede verse comprometido por una mala decisión al momento de escogerlo o combinarlo.




Los colores causan emociones, alteran y trasmiten sensaciones muy distintas dependiendo de la persona que los percibe y cada persona reacciona distinto a un mismo color.  El tema de escoger colores se puede enfocar desde un punto de vista psicológico. El abanico de colores es muy amplio y se clasifican como cálidos  y fríos, colores que amplían y reducen espacios, llegan a complicarnos  en el tema de buscarlos para nuestro proyecto, pero hay otras consideraciones que nos ayudan y nos simplifican la tarea. Los colores claros reflejan mejor la luz por lo que si queremos espacios muy iluminados, debemos de utilizar estos colores, Los  oscuros son absorbentes de la luz,  si queremos dirigir la iluminación a ciertos lugares para resaltar algo, los aplicamos para lograr este efecto.


Partiendo desde la clasificación que mencioné antes y que es totalmente cierta,escogemos la gama que va a predominar  en nuestras casas, manteniendo siempre la armonía entre los espacios, con un mismo color podemos hacer cantidad de tonalidades y/o combinarlos para impactar con algunos cambios.

Todo va a depender de lo que quieres, y si son clientes, él debe  participar e  identificarse con el espacio y lo que quiere. Si es un espacio de permanencia, es mejor colocar colores suaves en combinación con la gama de los cálidos, convirtiéndolos en áreas muy confortables. Al contrario de si queremos algo como para no quedarse, mejor se coloca tonalidades frías.

Hay colores muy difíciles, pero siempre se busca el equilibrio y se juega mucho con la intención del espacio, pintar paredes sin saber qué tipo de mobiliario vas a colocar no es recomendable, no está bien colocarlos  para que compitan, la prioridad es la de lograr espacios hermosos y agradables.  La calidad del mobiliario, me refiero a si son piezas importantes o de colección dejo que sean los protagonistas, de la otra manera resalto  y enfoco la atención del usuario hacia el color.


Un detalle que siempre me funciona, es que nunca coloco color en columnas o vigas, estos siempre quedan en tonos de blancos matizados, esto ayuda a dar descanso a la vista y no saturar el espacio, a menos que el cliente me lo exija o le guste, tampoco coloco color en los techos, estos siempre son blancos y trato de bajar este color hacia las paredes hasta un espesor de 5 o 6 cms, dependiendo del alto de la habitación, lo hago más o menos ancho, y se ve muy interesante y de mucho detalle.

- En resumen el color se relaciona:
- Con la forma y figura de los objetos donde vas a colocar color
- Interviene en percepción de las dimensiones del área
- Afecta el peso visual de todo su entorno
- Y ayuda a sugerir el uso y función de los espacios      

En todo caso lo más importante es poder trasmitir con color lo que queremos que el espacio exprese. Si somos nuestros propios asesores o lo hacemos para otro, debemos procurar llegar a los gustos  personales de cada quien. 

Usa el color como complemento y satisface a los usuarios.


Por: Arquitecto, Julieta Chiriboga
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Bogotá - Colombia